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<feniciosenamerica.htm>                                                                                                                                                                              <Índice>                           <Origen>
 
| Como llegaron los
  Fenicios a América del Sur   Por
  Bernardo V. Biados     Tabla
  de Materias                   Este documento destaca la necesidad de estudiar seriamente
  los contactos transoceánicos antes de Colón. En este caso,  la llegada de los navegantes fenicios a
  América del Sur y que pasó para que ello ocurriera. No somos expertos
  navegantes, ni mucho menos, pero utilizando la historia y la documentación disponible,
  creemos poder demostrar como los fenicios arribaron América en tiempos
  precolombinos. En este trabajo se encontrarán párrafos que parecen
  repetitivos  pero que son necesarios
  para el entendimiento contextual  del
  mismo.             Comenzamos con los viajes portugueses de exploración y
  conquista hacia el continente negro, preludio de su búsqueda de especies en
  Asia (India). Allí vimos que  sus
  técnicas de navegación eran simples y prácticas, no muy alejadas de las de
  los navegantes antiguos. La utilización 
  de los vientos, las corrientes marinas y especialmente la estrella
  Polar o Fenicia  para su
  travesía,  eran semejantes a aquellos
  que se aventuraron hacía mucho tiempo a 
  desafiar el Mar. Los principales candidatos eran los fenicios, y
  teníamos dos documentos relacionados con viajes al  continente africano.   El primero de ellos fue la
  circunvalación  de dicho continente,
  llamado por ese entonces Libia,  por
  marinos fenicios patrocinado por el faraón egipcio[1],
  Necho, Neko  o Necao, [2](610-595
  Ac.;  tomado de una crónica del
  historiador griego  Heródoto de
  Halicarnaso   (484 BC– 425 BC).que recogió en Egipto; y
  el segundo ¨El Periplo del Almirante Cartaginés Hano o Hannón Hanno¨,
  500  A de C. el cartaginés dio la
  vuelta al Cabo Verde y  regresó a
  Cartago en el mar  Mediterráneo.  Con esas referencias nos pusimos a
  trabajar y el producto de esas investigaciones es  el presente estudio.             Nos llevó muchas horas de indagación y pesquisa para
  proporcionarle a los lectores elementos comprensibles y gráficos. No
  necesitamos, como se hace comúnmente, embrollar este  estudio para darle un sentido académico
  sin necesidad y   que quede para unos
  pocos, lo que no nos interesa.             Aceptamos críticas pero que sean valederas, prácticas
  y  lógicas en la búsqueda del
  mejoramiento de las investigaciones.                                                                                                                       La
  Paz Bolivia 2010   ------------------------------------------------------------ APRETE Las Fotos para ampliar:       Mapa de las zonas del mundo de
  Macrobio, siglo IX               Conocemos que los portulanos, mapas de puerto a puerto,
  eran en la zona del Mediterráneo para navegaciones costeras. O sea para
  navegaciones de alta mar no eran útiles.              La atención se centra en las rutas marítimas de
  navegación, en los detalles del litoral y el relieve costero, en los cursos
  bajos de los ríos -especialmente en sus tramos navegables-, en las mareas y
  en los vientos. Las primeras cartas portulanas aparecen en Génova, Venecia y
  Palma de Mallorca, y estos continuarían siendo los principales centros de
  producción cartográfica durante los dos siglos siguientes.       c.1325. Anónimo (taller Vesconte). Liber Fidelium  (Sanudo). Biblioteca Británica.     
       Aguja
  rotatoria de una brújula  en una copia de la 'Epistola de magnete'  de
  Peter Peregrinus (Oxford)   La
  exploración  portuguesa por las costas
  oeste de  África 
     Cabo
  Bojador y Cabo Verde     El
  regreso a Portugal luego de pasar el Cabo Bojador 
               De la llamada Media Luna Fértil de los descubrimientos
  geográficos, la región comprendida entre el Algarve portugués y la costa de
  Huelva, habían partido desde comienzos del siglo XV innumerables
  embarcaciones que recorrían la costa africana en busca de especias
  adentrándose cada vez más hacia el sur y hacia el oeste, ya que en su camino
  de regreso debían practicar la llamada "Vuelta de Guinea",
  dirigiéndose hacia el oeste en busca de los vientos alisios para poder tomar
  entonces el rumbo a la península.[8]   El navegante Alvise Cadamosto (Venecia 1432-1488)             Al año siguiente (1456) vuelve a organizarse la expedición y
  llegan hasta la desembocadura del Gambia y las islas Bissagos, pero los duros
  vientos los arrastran hacia el oeste e inopinadamente descubren el
  archipiélago de Cabo Verde. Como señala Céspedes del Castillo ésta será la
  ruta que los alisios del Sureste obligarían a los portugueses a seguir.
  Tocando primero las islas de Cabo Verde y ya más al norte y con la ayuda de
  los alisios del Nordeste llegar a las Azores para luego dirigirse a Lisboa.[9]       Las mayores
  corrientes superficiales oceánicas en el mundo están causadas por los vientos  dominantes. Las corrientes pueden ser
  frías, como la corriente de deriva del viento del oeste,  o cálidas, como la corriente del Golfo. Las
  corrientes circulan en trayectorias llamadas giros,  moviéndose
  como las agujas de un reloj en el hemisferio norte y al contrario en el sur.[10]       Mar
  de los Sargazos       Costa
  africana y las Islas Azores   1)   
  Piri
  Reis y los Portugueses Islas Azores             Varias leyendas en el mapa de Piri Reis parecen indicar
  el origen genovés de uno o más de los mapas en que se basó el compilador(Piri
  Reis). La leyenda que acompaña a las Azores, por ejemplo, dice:               “Un buque genovés que zarpó de Flandes fue
  llevado por una tormenta a estas islas, y así se las llegó a conocer.” Según lo que se sabe, las
  Azores fueron vistas por primera vez alrededor de 1420 por un buque
  portugués, no uno genovés. Sin embargo no hay que descartar la posibilidad de un descubrimiento anterior por parte
  de los genoveses, aunque el conocimiento de este hallazgo habría estado
  limitado a círculos genoveses.[11]       Principales
  corrientes de los océanos. Para mejor comprensión de los  viajes
  transoceánicos entre África y América reproducimos el mapa con las corrientes
  marinas en Atlántico  norte y sur.
  Cortesía “Albatros,   Enciclopedia
  del mar”, Barcelona, 1974.   El
  regreso a Portugal luego de pasar el Cabo Verde             Resuelto ese problema
  de regreso a Europa, comienza otro, cuando se dobla el Cabo Verde,  en 1444[12],
  aquí está la zona de las grandes calmas y, para regresar, es preciso efectuar
  un viaje triangular que, adentrándose en el Océano, llega casi hasta la costa
  del desconocido Brasil.              Los portugueses aquí
  hicieron una técnica simple pero revolucionaria, basados en observaciones de
  la Estrella Polar[13]
  que daba bastantes correctos para dar la latitud, en distancias no en medidas
  angulares. Este procedimiento es posible hasta la línea del Ecuador, o sea
  hasta que sea visible la Estrella polar.              Esta es una fase
  transitoria que rigió las navegaciones portuguesas entre 1434, y los fines
  del siglo XV.     La Estrella
  Polar es la estrella visible del hemisferio norte más cercana  al punto hacia
  el que se dirige el eje de la Tierra, señalando de manera  aproximada la situación del polo norte
  celeste. La Estrella Polar  ha sido utilizada por los navegantes a
  través de la historia  y todavía se utiliza para determinar el
  acimut y la latitud.       El acimut entre dos puntos es el ángulo que existe
  entre la dirección  Norte y la
  alineación que determinan esos puntos, luego  la Estrella Polar nos sirve para determinar esa
  dirección Norte.  La altura
  sobre el horizonte de la Estrella Polar expresada  en grados
  y minutos es la latitud del observador.       Si se observa
  regularmente y a lo largo del año el cielo  Norte, se puede observar que todas las
  constelaciones  giran en
  torno a una zona, y hay una estrella cuya  posición relativa es constante. Esa
  estrella  es la estrella Polar.      La leyenda de las Islas de Cabo Verde             La leyenda de las
  Islas de Cabo Verde parece reforzar la idea del uso de Piri Reis de las
  cartas naúticas portuguesas, pues dice:              “Los genoveses llaman
  al capitán de esta carabela Messer Anton, pero él se crió en Portugal. Un día
  su carabela se vio envuelta en una tormenta y fue arrastrada a estas islas.
  Allí él encontró mucho jengibre y fue el primero en describir estas islas.”             A bordo del buque portugués que descubrió las
  Islas de Cabo Verde en 1456 había un genovés al servicio de los portugueses
  que se llamaba Antoniotto Usodamare.             Nadie que mire la
  sección sur del mapa de Piri beis podrá dejar de admirar la exactitud de la
  costa sudamericana. Esto es algo que Piri sacó de las cartas marinas
  portuguesas, como lo indican los nombres de lugares. Una leyenda explica:     Piri Reis y los Portugueses y Brasil             ¨Un buque portugués de camino a la India se encontró con un viento
  contrario que soplaba desde la costa. El viento lo alejó de la costa… Después
  de ser desviado hacia el sur por la tormenta, avistaron una costa frente a
  ellos. Se acercaron …y vieron que había buenos anclajes, y entonces bajaron
  el ancla y fueron a la costa en botes… Estuvieron allí ocho días, haciendo
  trueque con la gente mediante signos…La antedicha barca regresó a Portugal
  sin ir a la India, y presentó una relación. Se enviaron ocho carabelas.
  Describieron estas costas en detalle y todo esto se ha copiado de ellos¨.             Esto se refiere al descubrimiento
  accidental del Brasil por Pedro Alvares Cabral en 1500, camino a la India.
  Como aclara Piri Reis en su Kitab-i Bahriye, el secreto de dar la vuelta al
  Cabo de Buena Esperanza, en el extremo sur de África, consistió en
  encaminarse primero hacia el sudoeste para recoger los vientos que los
  impulsarían alrededor del Cabo.[14]     Mapa de Piri
  Reis             El mapa de Piri Reis
  es una carta náutica elaborada supuestamente por el almirante otomano Piri
  Reis en 1513 y publicada en 1523 como parte de su obra ¨El libro de las materias
  marinas¨.   Posibilidad de llegar a América del Sur
  desde África             Por todo lo visto
  anteriormente podemos resumir:             Hay una forma
  práctica de llegada a América del Sur desde las costas de África, por la
  utilización de los vientos alisios y el 
  uso de la estrella Polar o Fenicia.              Navegación de altura:
  1. f. La que se hace por mar fuera de la vista de la tierra, y en la que se
  utiliza, para determinar la situación de la nave, la altura de los astros.     Relatos
  Históricos  de viajes Fenicios y
  Cartagineses   El faraόn Neko y los fenicios, Circunvalaciόn de Africa           Las posibilidades ciertas e históricas  de la llegada de los Fenicios o cartagineses a América  fueron:             La primera con la circunvalación de África  realizada por los fenicios por encargo del
  Faraón Egipcio Necho en el 600 B.C. 
  Los navegantes salieron del Mar Rojo y regresaron por las columnas de
  Hércules, Gibraltar,  al Mediterráneo
  y a Egipto. El viaje duró 3 años. Los fenicios construían embarcaciones  de 80 a 100 pies de largo. En época del
  Faraón  Necho, de  50 a 100 toneladas[15].
  Eran comparables a las carabelas de los portugueses del siglo XV. Podían
  recorrer una distancia de 100 millas en una hora.     
  carga fenicio (gauloi o gaulos)             Herόdoto se mofó de este viaje, 200 años después, pero él
  mismo confirma esta travesía  al
  referir:              “Al informar sobre su expedición, los
  fenicios, contaron lo siguiente: al navegar alrededor de Libia , África,
  vieron un día que tenían el sol a la derecha. Puede que esto se lo crea otro,
  pero yo no. Así se exploró por vez primera esta parte de la tierra “.              La circunnavegación de África que los navegantes fenicios
  realizaron por encargo por el faraón 
  Necho fue un éxito. La prueba 
  reside precisamente en la observación hecha por lo hombres de mar, de
  que, de pronto, el sol apareció a su derecha.              El fenómeno se
  produjo cuando los fenicios doblaron el cabo de Buena Esperanza,  al dar la vuelta al extremo sur de África,
  la proa tuvo que avanzar en dirección Oeste, por lo cual el sol solo pudo ser
  visto a estribor, desde el ocaso. Es lógico, sin embargo, que tal hecho
  resultara  difícil comprender en
  aquella época.                ¨En ese sentido, es evidente que Libia está rodeada de agua por
  todas partes, salvo por el lado en que confina con Asia; que nosotros
  sepamos, el rey de Egipto Neco fue el primero que lo demostró, ya que, tras
  interrumpir la excavación del canal que, desde el Nilo, se dirigía al golfo
  arábigo, envió en unos navíos a ciertos fenicios, con la orden de que, a su
  regreso, atravesaran las Columnas de Heracles hasta alcanzar el mar del norte
  y llegar de esta manera a Egipto. Los fenicios, pues, partieron del mar
  Eritreo y navegaron por el mar del sur. Y cuando llegaba el final del otoño,
  atracaban en el lugar de Libia en que, en el curso de su travesía, a la sazón
  se encontraran, sembraban la tierra y aguardaban hasta la siega. Y, una vez
  recogida la cosecha, reemprendían la navegación, de manera que, cuando habían
  transcurrido dos años, en el tercer año de travesía, doblaron las Columnas de
  Heracles y arribaron a Egipto. Y contaban -cosa que, a mi juicio, no es digna
  de crédito, aunque puede que lo sea para alguna otra persona- que, al
  contornear Libia, habían tenido el sol a mano derecha. Así fue como se
  conoció por vez primera el contorno de Libia; y posteriormente han sido los
  cartagineses quienes lo han confirmado¨. 
  (HERÓDOTO, Historia, IV 42, 2 – 43, 1, traducción de C. Schrader,
  Biblioteca Clásica Gredos, Madrid, 1979.)          
  La Libia se presenta a los ojos en verdad como rodeada de mar, menos
  por aquel trecho por donde linda con el Asia. Este descubrimiento se debe a Neco,
  rey de Egipto, que fue el primero, a lo que yo sepa, en mandar hacer la
  averiguación, pues habiendo alzado mano de aquel canal que empezó a abrirse
  desde el Nilo hasta el seno arábigo, despachó en unas naves a ciertos
  fenicios, dándoles orden que volviesen por las columnas de Hércules al mar
  Boreal o Mediterráneo hasta llegar al Egipto. Saliendo, pues, los fenicios
  del mar Eritreo, iban navegando por el mar del Noto: durante el tiempo de su
  navegación, así que venía el otoño salían a tierra en cualquier costa de
  Libia que les cogiese, y allí hacían sus sementeras y esperaban hasta la
  siega. Recogida su cosecha, navegaban otra vez; de suerte que, pasados así
  dos años, al tercero, doblando por las columnas de Hércules, llegaron al
  Egipto, y referían lo que a mí no se me hará creíble, aunque acaso lo sea
  para algún otro, a saber, que navegando alrededor de la Libia tenían el sol a
  mano derecha. Este fue el modo como la primera vez se hizo tal descubrimiento“.  (Heródoto Los nueve libros de la Historia, IV, XLII.[1])                   Los Fenicios llegan,  por la costa,  hasta las cercanías del hoy llamado Gabón[17]
  y allí comienzan a ver la estrella Polar o Fenicia[18].  Continúan por la litoral hasta encontrarse
  con el mismo problema que tuvieron los portugueses siglos después, y
  guiándose también por este astro realizan el mismo procedimiento para llegar
  a las columnas de Hércules.     Gabón     El
  periplo del almirante cartaginés Hannon             El almirante  Hano,
  Hannon, cartaginés realizó una circunnavegación de Libia, África, pero
  exactamente al contrario tomó la ruta contraria. O sea pasando  las columnas Hércules a la ida.             Año 510, Antes de Cristo, aún 
  puede hallarse  este relato
  su  versión griega.              Otros estudios indican que, Hanno, 500  A de C. el cartaginés dio la vuelta al Cabo Verde y  regresó a Cartago en el mar  Mediterráneo.              Es el general Hannón uno de los personajes
  más importantes del mundo de la exploración, su bitácora de viaje contribuyo
  al conocimiento del misteriosos continente Africano, constituye la única referencia
  hasta que siglos después tomaron la posta los portugueses.             Hannon realiza su expedición en los tiempos
  en que Cartago estaba en todo su esplendor, en el año 470 (aC). El testimonio
  de esta muy importante exploración se halla en el códice Heidelber-gensis en
  los que se lee: ¨Periplo de
  Hannon, caudillo cartaginés, por las costas de Libia, más allá de las
  Columnas de Hércules, puesto en ofrenda en el templo de Cronos¨.             Hannón escribió su bitácora de viaje en una
  tableta que fue colgada en el templo de Baal (a quien los griegos
  identificaron con Cronos) cuando regresó a Cartago. Se dice que este relato
  fue traducido al griego, correspondiendo esta versión al conocido Periplo
  de Hannón.             Hannon inicia su viaje en Cartago (Túnez) y
  llegó al estrecho de Gibraltar y siguiendo rumo al sur descubrió el cabo
  Bojador y pudo arribo hasta las costas de la actual república de Liberia,
  luego se interno en el Golfo de Guinea, en la desembocadura del Camerún.             El propósito de esta expedición fue
  comercial, fundando varias colonias cartaginesas. La flota estaba compuesta
  de 60 barcos[19] y varios
  miles de personas, incluyendo familias enteras de colonos.             La primera ciudad que fundaron la llamaron
  Thimiaterion, se desconoce su ubicación, luego fundaron Soloeis al parecer en
  Libia en el que construyeron un templo dedicado al culto de Poseidón.             Luego fundaron ciudades en la costa que se
  llamaron Karikon Teijos, Gytte, Akra, Melitta y Arambys.             Algunos intérpretes del periplo afirman que
  Hannón alcanzó más de lo que es hoy en día Sierra Leona hasta el Cabo Palmas,
  en parte debido a que su descripción del amanecer y la configuración de la
  parte norte del cielo, un detalle que los geógrafos griegos encontraron
  absurdos e imposibles.             En la isla que constituyó el término de su
  viaje el explorador encontró lo que describió como "mujeres
  peludas", interpretadas como gorilas. También describe personas
  muy pequeñas, se ha especulado que Hannón encontró pigmeos.   El periplo de Hannon
  según Pedro Rodriguez  de Campomanes(1723-1802).   Texto del viaje de
  Hannón.  (Texto del Periplo) 
           I. Los cartagineses decidieron que
  Hannón había de navegar más allá de las Columnas de Herakles y fundar
  ciudades libio-púnikes. Se hizo a la mar con sesenta pentekónteras y unos
  treinta mil hombres y mujeres así como provisiones y todo lo necesario.            II. Después de navegar dos días
  más allá de las Columnas fundamos la primera ciudad que llamamos
  Thimiaterion. Detrás de ella había una gran llanura.            III. Navegando desde allí hacia
  Occidente llegamos a Soloeis un promontorio libio cubierto de árboles. En él
  fundamos un templo a Poseidón.            IIII. Caminamos medio día hacia el
  este y encontramos un lago no lejos del mar cubierto de una gran aglomeración
  de altas cañas en las que pacían elefantes y muchos otros animales salvajes.            V. A una jornada de ese lago
  fundamos ciudades en la costa que se llamaron Karikon Teijos, Gytte, Akra,
  Melitta y Arambys.            VI. Dejando aquello llegamos al
  ancho río Lixos (río Draa) que viene de Lybia junto al que unos nómadas
  llamados lixitas hacían pastar sus rebaños. Estuvimos algún tiempo con ellos
  y quedamos amigos.            VII. De allí hacia el interior
  habitaban los inhospitalarios etíopes en un país cercado por altas montañas y
  lleno de animales salvajes. Dicen ellos que el río Lixos nace allí y que
  entre las montañas viven trogloditas de raro aspecto y que según los lixitas
  puden correr más rápidamente que los caballos.            VIII. Tras tomar a algunos lixitas
  como intérpretes navegamos hacia el sur a lo largo de la costa del desierto
  durante dos días y después un día más hacia el este y encontramos una islita
  de cinco estadios de circunferencia en el extremo más lejano del golfo
  (¿cercana al delta del río Senegal?). Nos establecimos allí y le llamamos
  Cerne. Por nuestro viaje consideramos que el lugar estaba completamente
  opuesto a Cartago ya que el viaje desde éste a las Columnas y desde éstas a
  Cerne era completamente semejante.            IX. De allí remontando un gran río
  llamado Jretes (Senegal) llegamos a un lago en el que había tres islas más
  grandes que Cerne. Para terminar la jornada llegamos desde allí al final de
  lago dominado por algunas altas montañas pobladas por salvajes vestidos con
  pieles de fieras que nos apedrearon y nos golpearon impidiéndonos
  desembarcar.            X. Navegando desde allí llegamos a
  otro amplio río lleno de cocodrilos e hipopótamos. Desde allí volvimos atrás
  y regresamos a Cerne.            XI. Desde allí navegamos doce días
  hacia el sur pegados a la costa que estaba toda habitada por los etíopes
  quienes no se quedaban en sus tierras sino que huían de nosotros. Su lengua
  era ininteligible incluso para nuestros lixitas.            XII. El último día echamos el
  ancla junto a unas altas montañas cubiertas de árboles cuya madera era de
  suave aroma (Cabo Verde).            XIII. Durante dos días las
  rodeamos y llegamos a un inmenso golfo (la desembocadura del Gambia) en cada
  una de cuyas orillas había una llanura en las que de noche veíamos hogueras
  grandes y pequeñas que ardían a intervalos por todas partes.            XIIII. Hicimos aguada allí y
  navegamos durante cinco días a lo largo de la costa hasta llegar a una gran
  bahía que nuestros intérpretes llamaban El Cuerno del Oeste. En ella había
  una amplia isla y en la isla un lago de agua salada dentro del que había otra
  isla en la que desembarcamos. De día no podíamos ver nada más que el bosque.
  Mas por la noche distinguíamos muchas hogueras y oíamos sonido de flautas,
  tañer de címbalos y tímpanos y gran estrépito de voces. El terror se apoderó
  de nosotros y los adivinos aconsejaron abandonar la isla.            XV. Navegamos pues apresuradamente
  y pasamos frente a una costa ígnea llena de incienso ardiente. Grandes
  corrientes de fuego y lava fluían hasta el mar y era imposible acercarse a
  tierra a causa del calor.            XVI. Dejamos aquello deprisa por
  temor y durante cuatro días de navegación vimos la tierra envuelta en llamas.
  En medio había una llama altísima mucho más que las otras que llegaba al
  parecer a las estrellas. De día vimos que se trataba de una montaña muy alta
  llamada El Carro de los Dioses (¿el Monte Camerún, de 4070 metros?).            XVII. Navegando desde allí durante
  tres días pasamos corrientes ardientes de lava y llegamos a un golfo llamado
  el Cuerno del Sur.            XVIII. En el extremo más lejano de
  esta bahía había una isla como la anterior también con un lago en el cual
  había otra isla llena de salvajes. Desde lejos la mayor parte eran mujeres
  con cuerpos peludos a las que nuestros intérpretes llamaron gorilas. Los
  perseguimos pero no pudimos capturar a ningún hombre pues todos ellos
  acostumbrados a trepar por los precipicios se escaparon defendiéndose
  tirándonos piedras. Cazamos tres mujeres que mordieron y magullaron a los que
  las cogían no dispuestas a seguirles. Las matamos al fin y desollándolas
  llevamos sus pieles a Cartago. No navegamos más allá porque se acabaron
  nuestras reservas"[20] Periplo de Hannón   Comentario
  2             El periplo de Hannón: Es indudable que este almirante
  llega hasta el límite donde comienza a desaparecer del firmamento la estrella
  Polar o Fenicia,[21]
  cercanías de la Línea Ecuatorial, puesto que era su referencia en caso de
  adentrarse en el Océano Atlántico. De ese punto regresa al mediterráneo
  utilizando el mismo procedimiento de navegación los portugueses.    1)    El tema es así, cualquier expedición que en esos
  tiempos, como en el caso de los enviados por el   faraón Necho,   hubiera
  dado la vuelta a África se encontraría con los mismos problemas que los
  navegantes portugueses, por lo tanto, 
  tendría que tomar la misma ruta. 
  De allí por extravío, naufragio o cualquier otra razón hubieran
  llegado a América del Sur, y finalmente al Río Amazonas.              2)   Asimismo, en el tema del 
  regreso de los cartagineses del Almirante Hannón, se  cumplen las mismas condiciones, debió
  hacerse de la misma forma, y  no es
  extraño que algunas de sus naves llegaran a Sur América, Amazonas y de allí  a corazón de América.               Hay formas de regresar al Mediterráneo .             Los fenicios conocían muy bien la técnica de
  construcción de barcos,  la manera de
  conducirlos y orientarse en el mar. 
  Una vez lanzados al mar tomaron los vientos alisios y las corrientes
  que bordean América del Sur llegan a las Antillas, golfo de México luego al
  Este hasta llegar a las Azores y el Mediterráneo.   Mapas
  anteriores al descubrimiento de Colón             Hay mapas anteriores a la llegada de Colón a América,
  como o quien llegó antes no es un misterio este trabajo lo demuestra. Además
  las corrientes del Océano Pacífico y del Atlántico se utilizaron para estos
  viajes.              Otro pequeño detalle, Colón conocía perfectamente los
  mapas de esos tiempos, buscaba la cuarta India. ¿Que era? América (del Sur),
  como se puede ver en el ejemplo de Martellus.      Mapa de Henricus Martellus, latinizado
  de Heinrich  Hammer Florencia (1489) Coloreado sobre
  papel,  300 x 470 mm.Fº 68 vº y 69 rº del Add.  Ms. 15760 British
  Library,  Londres .             Vemos a América del Sur pegada
  a Asia, el problema es que en ese tiempo se consideraba, aún,  la tierra plana  y el centro era El Cairo. Como los cartógrafos tenían un
  horizonte de 360 grados tuvieron que suprimir el Océano Pacífico, para poder
  ubicar así a América del Sur.             Vemos que tenían
  todas las referencias de América del Sur 
  incluso buena parte de sus relieves geográficos, es indudable que
  alguien llegó allí antes de Colón.     | 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
[1] Saita  De la dinastía griega en Egipto.
 
[2] Uahemibra Nekau o Necao II,
fue un faraón de la dinastía XXVI que gobernó en el antiguo Egipto de 610 a 595
a. C.
 
[3] Peter Peregrinus de
Maricourt; en francés Pierre Pèlerin de Maricourt; Latina Petrus Peregrinus de
Maharncuria) (fl. 1269), natural de Picardie, Francia,  fue un estudioso francés del siglo XIII que
realizó experimentos sobre magnetismo y escribió el primer tratado existente
para las propiedades de imanes. Su trabajo se destaca por la primera discusión
detallada de una brújula.
 
[4] En 1432, Gonçalvo Velho
incorporó las islas Azores a los dominios portugueses. Hasta ese momento, las
exploraciones portuguesas en África solo habían conseguido llegar hasta el Cabo
Bojador, en la costa de Sahara Occidental. Le llamaban el ?cabo del miedo?,
debido a una serie de leyendas que contaban que el que se atreviese a cruzarlo
moriría.
[5]En 1433, Gil Eanes llegó
hasta las canarias. En un segundo intento, Gil Eanes consiguió avanzar más allá
del cabo Bojador en 1434. Su regreso a Portugal aclaró que el mundo no se
acababa en ese punto. En mayo de 1434, Gil Eanes preparó un barco de 30
toneladas con un solo mástil y una única vela redonda y también impulsada por
remos y parcialmente cubierta. Con ella, al llegar a las proximidades del cabo
del miedo, decidió poner rumbo hacia el oeste alejándose de la costa de África.
Después de un día completo de navegación lejos de la costa, se encontró con una
plácida bahía de vientos suaves, y luego se volvió hacia el sureste y pronto se
dio cuenta que había dejado atrás el peligroso cabo Bojador.
 
[6]   La principal preocupación en los viajes de cabotaje residía en
los cambios de los vientos que se producen en la zona próxima al cabo Bojador,
donde comienzan a soplar fuertemente del noreste en todas las estaciones. Al final
se descubrió que había vientos más favorables alejándose de la costa.
 
[7] Con las corrientes sucede
algo parecido: desde Cabo Verde, siguiendo los alisios, caminan hacia el oeste;
bordean la costa de América del Sur; llegan a las Antillas y penetran en el
golfo de México; desde ahí salen por Florida y las Bahamas, tomando dirección
Este (corriente del Golfo), para llegar a las Azores y Portugal.
http://www.multired.com/ambiente/dimarmar
[8] Extraído de Biografias y
Vidas. http://www.biografiasyvidas.com.
 
[9] El navegante Alvise
Cadamosto (Venecia 1432-1488). mgar.net/enrique2.htm
 
[10] new.taringa.net
 
[11]. Enseñanzas Náuticas.  nauticajonkepa.wordpress.com/...
 
[12]
En 1444, Nunho Tristâo llegó hasta la desembocadura del río Senegal, mientras
que Dionís Díaz (Dinis Dias) divisó el cabo Verde y descubrió la Terra dos
Guineus (Senegal-Guinea).
En 1446, Alvaro Fernández superó el Cabo
Verde y llegó hasta Sierra Leona. En 1455, el veneciano al servicio de Portugal
Alvise Ca'da Mosto (Cadamosto), exploró hasta la desembocadura del río Gambia.
Al año siguiente, juntó con el genovés Antonio de Noli, descubrió las islas del
cabo Verde y recorrió el litoral africano hasta Casamance.
 
[13] Los fenicios utilizaron la
estrella Polar o Fenicia en sus viajes.
 
[14] Enseñanzas Náuticas.  nauticajonkepa.wordpress.com/...
 
[15] El barco mercante fenicio
por excelencia era el Gaulos ( bañera), nombre dado por los griegos y era una
nave de forma redonda y robusta con una eslora de entre 25- 30 m ,7 m de manga
y 1,5 mts de calado aproximadamente ,desplazando fácilmente una capacidad de
carga superior a las 100 toneladas http://www.celtiberia.net/articulo.
 
[16] Circunnavegación fenicia de
África con Necao II (616 a.C.) www.bloganavazquez.com/.../
 
[17] (Guinea Ecuatorial y
Camerún)
 
[18] Si debían internarse en el
mar de noche, procuraban orientarse por las estrellas aprovechando los
conocimientos astronómicos obtenidos de los caldeos, tomando como referencia la
Estrella Polar, denominada en la antigüedad Estrella Fenicia.
 
[19] De tal forma que el lexema
nave-de-Tarsis pudo constituirse en un mero término técnico, significando algo
así como «buque de navegación de altura». La expresión habría sido tomada por
los israelitas de los mismos fenicios, teniendo su origen en el hecho de que
los viajes a la lejana Tarsis significaron en su momento (mediados del siglo X)
la máxima hazaña de navegación conseguida por los fenicios, para la cual se
necesitaba un tipo de navío especial que sintetizaba todos los avances técnicos
logrados por los fenicios en el arte de la navegación. Los Orígenes Bíblicos de
Sefarad. Luis A. García Moreno.
 
[20] El texto está copiado de la
siguiente dirección: http://blogia.com/terraeantiqvae/index.php?idarticulo=200411303
 
[21] Camerún, continua por la
costa hasta llegar al hoy llamado Gabón.